Política
Se lavan las manos

Un gobierno que nunca se hizo, se hace, ni se va a hacer cargo: tras la brutal represión, ahora culpan a la jueza

Javier Milei lavándose las manos (Foto: GROK-IA).

La reciente manifestación de jubilados en Buenos Aires, que exigían mejoras en sus pensiones, fue reprimida violentamente por las fuerzas de seguridad bajo órdenes del gobierno de Javier Milei. El operativo dejó un saldo de al menos 120 detenidos y 45 heridos, incluyendo al fotoperiodista Pablo Grillo, quien sufrió una fractura de cráneo tras el impacto de un cartucho de gas lacrimógeno.

Lejos de asumir responsabilidad por la desmedida represión, altos funcionarios del gobierno optaron por culpar a la jueza Karina Giselle Andrade, quien ordenó la liberación de 114 detenidos al considerar que “se encuentra en juego un derecho constitucional fundamental como es el derecho a la protesta”.

El vocero presidencial, Manuel Adorni, criticó la decisión judicial en sus redes sociales, acusando a la jueza de ser “responsable directa de la inseguridad en la Argentina” y de “militar la impunidad en cada fallo”. Por su parte, el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, sugirió que el Consejo de la Magistratura analizará la actuación de Andrade por posible incumplimiento de sus funciones.

Esta estrategia de desviar la atención y responsabilizar a otros refleja la incapacidad del gobierno de Milei para reconocer y abordar sus propias fallas. Mientras tanto, los jubilados, uno de los sectores más vulnerables de la sociedad, continúan siendo víctimas de políticas que desatienden sus necesidades y derechos fundamentales.

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José María Martoccia
Lo unico que les falta a estos hijos de re mil pu tas, es ahora querer reprimir también a la justicia
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