La ciencia, al matadero libertario: se eliminan programas clave para el desarrollo nacional, enterate cómo
La motosierra libertaria sigue su curso implacable, ahora enfocándose en el corazón del sistema científico y tecnológico nacional. Amparado en el controvertido decreto 70/23 y en la Ley de Bases, el gobierno de Javier Milei ha autorizado la eliminación de programas que no cumplan con los restrictivos criterios de “economicidad” y afinidad con sectores priorizados como agroindustria, energía, minería, economía del conocimiento e innovación.
La reciente resolución 10/2025 de la Jefatura de Gabinete, firmada por Guillermo Francos, marca el camino hacia el recorte masivo. Se evaluarán y eliminarán programas creados por el ex Ministerio de Ciencia, ahora reducido a una discreta Secretaría. Según el documento, los convenios vencidos y aquellos con baja ejecución serán dados de baja, exigiendo incluso la devolución de los fondos ya otorgados. Para los pocos que superen el 30 por ciento de ejecución, se permitirá una renegociación, siempre que haya presupuesto disponible, un escenario cada vez más improbable.
Expresamos nuestro más enérgico repudio a la Resolución 10/2025 emitida por el gobierno Nacional durante el día de hoy que plantea la eliminación de las investigaciones científicas relacionadas con las ciencias sociales, el medio ambiente y el calentamiento global entre otras. pic.twitter.com/XVbMZasVm3
— Fedun (@FEDUNArgentina) January 9, 2025
URGENTE! El gobierno de Milei acaba de destruir el sistema científico argentino de un plumazo.
— Rodrigo Quiroga 🔬 (@rquiroga777) January 9, 2025
Eliminan TODOS los programas científicos del país, excepto los enmarcados en las áreas de agroindustria, energía, minería, salud y economía del conocimiento.#MileiTerraplanista pic.twitter.com/cT9H9ryDuz
En nombre de una supuesta “crisis económica y financiera inédita”, la administración actual justifica lo que muchos sectores califican como un ataque directo al conocimiento. Los recortes afectarán especialmente áreas como ciencias sociales, medio ambiente y cambio climático, mientras que las investigaciones en sectores estratégicos quedan condicionadas a la disponibilidad de recursos.
La comunidad científica no tardó en reaccionar. La Federación de Docentes Universitarios (FEDUN) y otras organizaciones regionales calificaron la medida como “un grave retroceso” que amenaza la soberanía científica y compromete el desarrollo sostenible del país. Señalaron que este ajuste compromete no solo los avances en investigación, sino también las condiciones laborales de miles de trabajadores científicos.
En palabras del investigador del CONICET Rodrigo Quiroga, “el gobierno de Milei acaba de destruir el sistema científico argentino de un plumazo”. Su denuncia apunta también a la estrategia de subejecución de partidas en 2024, que ya había asestado duros golpes a iniciativas clave como Equipar Ciencia, Construir Ciencia y Redes Federales de Alto Impacto.
El llamado a la movilización es urgente. Desde las federaciones científicas, sindicales y universitarias se advierte que esta resolución refleja una postura negacionista sobre el rol estratégico de la ciencia en los desafíos globales y locales. La comunidad alerta que esta política no sólo retrocede décadas en materia de desarrollo, sino que compromete el futuro del país y el bienestar de su pueblo.
La motosierra de Milei no discrimina: desde la educación pública hasta la ciencia y la tecnología, todo parece ser terreno fértil para el desmantelamiento. Los sectores afectados denuncian que lo que está en juego es más que presupuesto: es el conocimiento, la soberanía y el futuro de Argentina.