El encuentro, dividido en dos etapas –primero Tolosa Paz a solas, luego con su esposo–, expone la fragilidad de una líder que, en lugar de renovar ideas y rostros, recurre a fantasmas del pasado.

Albistur, quien prestó su departamento en Puerto Madero al ex presidente Alberto Fernández, fue un habitué de Olivos durante la guerra abierta contra ella.

Junto a Tolosa Paz, impulsaron la reelección de Alberto y la fallida candidatura de Daniel Scioli

Acusados por el Instituto Patria de orquestar "operaciones sucias" en su contra, estos visitantes ahora posan como redentores.

Tolosa Paz, oriunda de La Plata como Cristina, mantiene lazos familiares superficiales –con la difunta Ofelia y la hermana Giselle–, pero su agenda es de traición calculada.

Desde diciembre de 2023, arma una línea "federal" de diputados en tensión con Máximo Kirchner.

Colaboró con el riojano Ricardo Quintela para desafiar la conducción del PJ que Cristina se adjudica como un feudo feudal, y se sumó al Movimiento Derecho al Futuro de Kicillof, desplegando vínculos con gobernadores para un armado nacional que la excluye.

Esta "recomposición" no es más que un salvavidas para una ex mandataria condenada por corrupción, que frena cualquier renovación en el peronismo.