El diseño, inspirado en la estética del videojuego Grand Theft Auto, mostraba una caricatura de Espert junto a Machado, un avión privado y la leyenda "200 mil dólares", en referencia a la transferencia de dinero que, según peritos del estado de Texas, habría salido de un fideicomiso compartido por Machado y Debora Lynn Mercer-Erwin hacia el dirigente liberal.

La chicana tuvo lugar en un contexto de creciente presión política: 27 diputados ya solicitaron la expulsión de Espert de la Cámara, mientras desde distintos sectores se advierte sobre la necesidad de esclarecer los vínculos financieros investigados.

Paulón reforzó su postura citando declaraciones recientes de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien había sostenido que "no podemos aceptar una alianza con un narco", apuntando que la presencia del legislador en la comisión generaba "ruido" político.

A pesar de la tensión, Espert contó con el respaldo de representantes del oficialismo y del PRO, lo que le permitió mantener cierto control en la comisión, aunque debió ceder momentáneamente la presidencia de la misma.

La puesta en escena de Paulón no fue un hecho aislado: el diputado socialista ya había recurrido en otras oportunidades a recursos simbólicos para instalar debates o exponer cuestionamientos en el recinto.

Esta vez, eligió la ironía visual de una remera para dejar expuesta la polémica que rodea a Espert y que promete seguir sacudiendo el escenario parlamentario.