De la torta, ni las migas van a ver: mirá cuanto aumentarán las asignaciones familiares en agosto
El Gobierno de Javier “Jamoncito” Milei ratificó un aumento miserable para las asignaciones familiares a partir de agosto, en consonancia con las migajas extra que les dio a los jubilados, y los aumentos también irrisorios que fijó de forma unilateral para el salario mínimo y que terminó de consolidar el hecho de que los trabajadores estén por debajo de la línea de la pobreza.
Este miércoles, el ministerio de Capital “Inhumano” que conduce la injunable Sandra Pettovello comunicó que la icónica Asignación Universal por Hijo (AUH) aumentará un triste y paupérrimo 4,63 por ciento y llegará a los 81.080 pesos. Por otro parte la AUH para chicos con discapacidades será de 263.791 pesos, y la asignación familiar por hijo de 40.505 para el primer rango de ingresos.
A partir de agosto, la AUH aumentará un 4,63% y alcanzará $81.010. También habrá aumentos en pensiones y asignaciones familiares. #ANSES #AUH #Aumentos
— Guillermo Román (@contactoguille) July 31, 2024
Este “aumento” se da en el marco de la nueva fórmula de movilidad impuesta por el “Presiduende”, la cual indica que las prestaciones deben aumentar mensualmente su monto de acuerdo al Índice de Precios al Consumidor (IPC) de hace dos meses, por ello el correspondiente 4,63 por ciento de aumento acorde a la inflación de junio.
Todo muy lindo en teoría, pero ninguno de los aumentos de “Jamoncito” tiene en cuenta la inflación de diciembre del 2023 (25 por ciento), ni la de los primeros meses de 2024 donde la inflación fluctuó entre los 20 y los 10 puntos porcentuales, lo que implica una perdida monstruosa de los valores. A esto hay que sumar también la devaluación brutal del peso frente al dólar, lo que hace todavía mayor el agujero en el poder adquisitivo.
Los aumentos "aceptables" de la era Milei siempre son números irrisorios que no alcanzan a cubrir ni de cerca la brutal pérdida que sufrió el poder de compra de los argentinos durante los primeros meses del "Peluca" en La Rosada.
De este modo, se termina de consolidar la tendencia a la estanflación, lo que se ve reflejado por el hecho de que a nivel regional, Argentina tiene los peores sueldos en dólares, y los precios más altos en productos de consumo diario y esencial.
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