Para muchos, la creación de la Gerencia de Proyectos Especiales refleja una falta de atención a los problemas básicos que aquejan a los habitantes de Moreno, como la carencia de servicios fundamentales como cloacas, agua potable y el estado de las infraestructuras en barrios periféricos.

El lanzamiento de esta nueva gerencia, cuyo presupuesto podría involucrar millones de pesos en iniciativas turísticas y urbanísticas, ha levantado una ola de descontento.

La crítica principal radica en que el dinero destinado a estas grandes inversiones podría haberse utilizado para resolver problemas estructurales en los barrios más necesitados de la ciudad. Los vecinos exigen que el gobierno municipal priorice la mejora de los servicios básicos y la calidad de vida de los residentes, antes de centrar esfuerzos en proyectos que no parecen beneficiar a la mayoría de la población.

Mientras la administración municipal defiende su estrategia como una forma de modernizar y posicionar a Moreno como un destino atractivo para el turismo y las inversiones, las voces disidentes insisten en que el desarrollo de la ciudad no puede ser a costa del bienestar de quienes viven en ella.

La controversia sobre la creación de la Gerencia de Proyectos Especiales continúa alimentando el debate en la comunidad, dejando claro que, para muchos, la prioridad sigue siendo la mejora de las condiciones de vida y el acceso a los servicios básicos.