La columnista invitada
Puntos de vista

Suicidio

¿Qué lleva a una persona a no querer vivir más?

Por Agustina Naveyra, especial para NOVA

¿Qué lleva a una persona a no querer vivir más? Supongo que habrá cientos de motivos…así como hay cientos de Historias…

La culpa, la decepción (sobre sí mismo) o sobre otros, la mala soledad, los miedos que van con uno y generan actos descuidados. Hay que tener cuidado con creer nuestros propios pensamientos…

Recuerdo una anécdota de una persona que se aisló, y todos los días la cantidad de horas que pasaba en soledad eran cada vez más.

Comenzó a consumir más alcohol, y menos comida, y menos paseos en las plazas, y más noticieros locales, y música melancólica, y se enojaba con todos con facilidad, y todos se iban apartando…y cuando llegaba la noche, al final, ni siquiera escuchaba música…Solo quedaban sus pensamientos.

Sin alimento para el cuerpo y con alimentos nefastos para el alma (pensamientos oscuros sobre sí mismo…y sobre otros), creyó que tenía una enfermedad terminal. Se autodiagnosticó Sin ir a ningún médico y tomó mucho más que alcohol. Tomó una decisión…

Decidió vivir.

Pidió ayuda: Sus amigos estaban ocupados, su familia miró para otro lado…

Sentado en un Bar, tomando, accidentalmente, escuchó una conversación de dos alcohólicos sobrios…

- ¿Cuánto tiempo llevás?

-Estoy re contento…hará dos meses que no tomo…Ya está. Me parece que dejo de ir eh…

-No te la creas…Es solo por hoy. Es el día a día eh…

Y, claramente no por casualidad, dijeron la dirección de donde eran las reuniones….

Y ahí encontró a los amigos que estaban ocupados, y a la familia…que no miró para otro lado.

En esa mesa nadie juzgaba a nadie.

Podes ver desde un médico, abogado, empresario, hasta alguien con antecedentes penales que va esposado para hacer su tratamiento y a quién el juez autorizó las salidas de la cárcel para eso…

Para juzgar solo está Dios y, los Jueces y lamentablemente los jueces…algunos, no todos, muchas veces se creen Dios. Tienen que cuidar su Imagen y a veces toman decisión en base a contextos sociales…

Mi amigo ya pagó su pecado.

Le dieron veinticinco años, y después más, y así le iban renovando su castigo…¿Estuvo mal lo que hizo?: Claro que sí. Y lo sabe, y lo reconoce.

¿Y qué pasó una noche? …En esa mesa se encontraron el Juez y el Preso….Ahí, en esa mesa, estaban para hablar de su consumo problemático y ambos bebían por lo mismo: Uno por juzgar y otro por ser juzgado. Estaban unidos hace años…y no lo sabían…

Sé que si lo contara me dirían: “¿Cómo podés ser amiga de un asesino”? Y les respondería: “De la misma manera que vos sos amigo de un pedófilo, o del congresista que se queda con el dinero destinado al Hospital de Niños o de un orfanato y él tiene una vida de lujo, mientras los chicos de ese orfanato no tienen ni una torta para sus cumpleaños. De la misma manera que vos sos amigo del pibe que trabaja en la DDI y usa su poder para fines personales y no para defender a la víctima. De la misma manera que sos amigo del policía que viola y del superior que mira para otro lado cuando una subordinada va y le cuenta semejante aberración”. Y podría seguir…

La confianza, al menos la mía…Es de Dios para abajo…

Y hasta el Papa se equivoca…

¿Qué pasó después de ése encuentro en esa mesa?: Desconozco porque no salió en ningún noticiero…

Y Si algún día se el desenlace…No creo que sea yo la que lo escriba…

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